sábado, 27 de agosto de 2011

¿Una boda convencional? Yes, please

Si estás leyendo este blog es porque, de un modo u otro, te ves obligada a hacer una boda menos "original" y diferente de lo que estabas pretendiendo, o bien no tienes presupuesto, imaginación, tiempo libre o sitio a disposición para celebrar un evento como los que salen en las revistas y los blogs de boda.








¿Esto está fuera de tu alcance? Style me pretty


Es decir, bien vives en un pueblo o una pequeña capital de provincias en los que la mayoría de los sitios para celebrar bodas son restaurantes, de mayor o menor renombre, cerrados y con una decoración estándar.


O bien tienes una enoooorme familia que te impide hacer esa boda íntima y especial de 60 invitados (y la verdad, no te apetece reñirte con ninguno, y eso incluye a esos primos que no ves nunca y a los que ni se te ha pasado por la cabeza no invitar para no crear un drama en la familia).


O bien todos esos sitios espectaculares piden un presupuesto y una capacidad de organización que no te puedes permitir (y sí, el DO-IT-YOURSELF está muy bien para el que sea habilidoso y no le importe dedicar los fines de semana a montar su decoración de boda, pero puede ser un suplicio para el resto).


O bien estás cansada de buscar por Internet y que la mayoría de los comentarios giren en torno a estas premisas "quiero una boda totalmente distinta a las demás", "quiero una boda íntima, muy especial, en algún lugar exótico", o "las diez claves para una boda diferente y nada convencional".


Sea cual sea el motivo, dos cosas:


a) Las bodas convencionales también permiten un margen muy amplio para ser personalizadas y dotadas de un glamour especial, basta con elegir bien los "instrumentos extra" conque las vas a personalizar, y de estos hablaremos en este blog.


b) Las bodas convencionales también tienen sus VENTAJAS. ¿Y cuáles son?


     1. Al ser todo mucho más sencillo y mecánico, te ahorras tiempo que puedes dedicar a otras cosas (hummmm.... ¿hacer el amor, podría ser? ¿o leer este blog? ;)


     2. Una boda de 300 invitados del pueblo puede ser muy muy divertida, sobre todo si entre estos se encuentran los típicos amigos del novio solteros (y un poco borrachos) que acaban con la corbata en la cabeza al final de la fiesta, y sorprendentemente ligándose a tu amiga de la universidad.


     3. Permite que el novio se involucre en los detalles como son la reserva del restaurante o del fotógrafo, pues son algo que se puede controlar (¿te imaginas preparando el evento vintage del siglo, y explicándole a tu novio primero, pobrecito, qué significa exactamente el término vintage? ¿o argumentándole que ese fotógrafo es mejor que el otro porque hace unas fotos más "dinámicas" y "naturales"?


     4. Al haber más gente, y ser tú la protagonista, puedes pasar de ser una princesita linda a ser toda una reina, ¡cubierta de besos y halagos todo el día!


De todos modos, no olvides que por mi convencional y sencilla que sea tu boda, lo que se lleva es añadirle un poquito de gracia a tu boda, personalizarla en lo posible, disfrutar con ella. Así que... ¿estás preparada?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡Gracias por tu comentario!

LinkWithin

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...